Si yo la hubiera conocido en Colombia estoy segura de que no seríamos tan amigas... Ella sería la segunda mejor amiga de mi hermana Clau... Esque mi Anita es bullosa, parrandera, borrachina, loruda, le gusta pararse en la mesa, le gusta ser el centro de atención... Siempre monopoliza mi cámara (tuve suerte de salir en esta foto bautizada "Picnik en el parque de la 93").
Por otro lado, Ana María siempre está llena de energía, no se cansa, no se para, no tiene problema, nunca dice no y siempre está lista a decirle las verdades en la cara a quien sea porque eso sí no se la deja montar... He aprendido de Ana Maria en pocos meses lo que no había querido en casi 25 años.
Terminando mi tiempo en Francia y despidiendo a Ana me descubro con un nudo en la garganta, el mismo que siento cada vez que algo concluye sin que yo esté lista para el final... Y entonces muchos recuerdos vienen nuevamente a mi mente, yo se qué va a pasar, es lo de siempre y la veo irse en su carro negro y me quedo alli, con mis ganas de decir -hasta mañana- pero con la impotencia de saber que es un eterno adios...
